Toma castaña UCI MARATON SERIES XCM !!!!
Ni cortos ni perezosos, los MTB Mira y nuestros apéndices los BTT
Landete, o viceversa, allá que te va el sábado a las 8,45 hacia Sabiñánigo, desde
la rotonda de Manzaneruela en dirección norte peninsular con un viento del
noroeste que se agudiza en el Valle del Ebro.
Llegamos a Sabiñánigo tras un
plácido viaje y un super-almuezo en el área de servicio 202, la recordaremos
para otras ocasiones, allí la sorpresa de que con los Contreras viene D. Kiko,
jeje, tiene galones en el trabajo y puede acompañarnos.
Lo primero dejar los bártulos y
las bicis en los hoteles dispuestos y a comer en el Mesón que nos ha preparado
Santiago, un mireño que vive en Sabi y que nos ha reservado este buen lugar
donde nos ponemos bien de codillo y de otros manjares ricos en hidratos de carbono.
La casa cuartel de esta población
nos acoge y la verdad está situada muy cerca de todo, de la salida y del lugar
donde recoger los dorsales, cosa que hacemos esa tarde.
Después salida a rodar, porque
según los pro´s debemos hacerlo, allí nos juntamos con otros compañeros de
Valencia que nos acompañan.
Tras la ducha paseo por Sabiñánigo,
una cervecita y a cenar en el pisito que nos ha facilitado la Benemérita, el
menú más hidratos, pasta fría de bicicletillas (made in Marta, depiladora
oficial y cocinera y de Beatriz que repite tras lo de la Matahombres). Tras comentar
ciertos chascarrillos que a más de uno dejaron helados y blancos a dormir como
lirones y a las 7.00 arriba, toca el despertador de Kiko pero este no le hace
ni caso. Alberto está con dolor de garganta, malo, malo, espidifrén al canto.
Desayuno ofrecido por los Contreras
y acabamos con los restos de la pasta de la noche anterior, un plátano y a
chutar millas. Parecemos chicas ¿Qué me pongo arriba, qué abajo, de largo, de
corto?
A las 9.00 en la salida, con
tiempo de calentar, allí empezamos a ver gente de TBR, de Ciclos, de Sisante, a
Pedro Montero (Hostería de Cañete), de BTT Requena, de Utiel… en fín estamos en
casa.
Salida por cajones y a chutar,
Miguelón en el cajón de M30 lo voy viendo en la salida pero lejos, a ver si lo
pillo, él se gira pero o no me ve o yo no consigo pillarle, no es hasta la
primera subida donde logro alcanzarle después de que el baje el ritmo, subida
de piedras, pie a tierra, mucho trafico, luego senda chulísima pero con tráfico,
pero vamos bien juntos, la bajada posterior de piedras es brutal y al
terminarla lechessss, la cala de la zapatilla de Miguelon se ha caído, no puede
continuar ¡trata de seguir sin cala, Migue!¡trata de seguir!, cual Luis Moya y
Carlos Sainz, al final la cala está en el pedal, ale a arreglar el asunto, nos
pasan un mogollón de ciclistas a los que vamos dando ánimos y llega a nuestra
altura Alberto que nos confiesa que va justito, las piernas no le van bien.
Tras discutir qué hacemos decidimos con buen criterio que la hacemos los tres
juntos y el objetivo a partir de ahí es que Alberto acabe la prueba. Todo es
rodar juntos y bien hasta la subida dura del día, por un terreno muy bonito, paramos
en todos los avituallamientos y nos hidratamos bien. La subida se hace larga, a
Alberto más aún porque va muy justo, pero al final tras muchas revueltas y
revueltas llegamos a la cima, nos tiramos y en 2 km leche otro rampón en el que
hay que descabalgar, arriba los bomberos me dicen que abajo hay avituallamiento
y me digo ale a bajar, ya tenía ganas, me tiro y alucino ¡vaya bajada, qué bien
va la 29”! Pido paso a los que andan y se apartan, los que van montados se
retiran porque yo voy a fuego, parezco un sputnik, una pasada de senda, mereció
la pena lo anterior.
En el avituallamiento paro para
esperar a Miguelon y a Alberto, el primero llega con una sonrisa de oreja a
oreja, también ha disfrutado, Alberto es otro cantar pero llega que no es poco.
A partir de aquí todo es rodar por buenos caminos, salvo meternos en el río que
es inevitable pero que no nos afecta porque son más las ganas que tenemos
de llegar a meta. Al final llegamos los
tres juntitos y con bien.
Vemos a los amigos y comprobamos
que todos hemos terminado y estamos sanos y salvos que es lo más importante,
las monturas se han portado bien.
El regreso bien, con nieve desde
Zaragoza hasta Ademúz, sin contratiempos.
Todo lo que no está contado aquí
se queda en la intrahistoria y las retinas de los que allí fuimos y compartimos
ese bonito fin de semana.
Gracias a todos los que vinieron y sobre todo
a los que aquí se quedaron, seguro que nos anhelaron, sobre todo las familias.
Próxima convivencia de MTB Mira en la Matahombres de septiembre.
Próxima convivencia de MTB Mira en la Matahombres de septiembre.
Mi próximo reto en Sabiñánigo
será la QH de carretera en 2014. A ver si hay suerte.
Josefer