Nos encontramos en Villar el equipo titular de hoy y de casi siempre, Josep, Joséfer, Alberto, Lino, Ernesto, Josep, Etes y yo. Bueno eso los que ibamos de naranja, por que tenemos tres individuos por ahí en custodia compartida, Diego y los hermanos Contreras que también hicieron acto de presencia con sus respectivos equipos.
La verdad es que se respiraba mountain bike por todos los lados, casi 900 almas ciclistas nos dimos cita en esta localidad serrana, el pueblo era todo un bullir constante de bicicletas, ciclistas, coches con bicicletas, cosas de bicicletas e historias de ciclistas y bicicletas. Un ambiente inmejorable e impresionante, desde luego es el deporte de moda.
Comenzamos a calentar y pronto me doy cuenta, de que hoy no haremos ningún milagro encima de la bici, tocará sufrir y acumular kilómetros que luego me den argumentos para ir a tope. Me percato también en el calentamiento de que la gente está muy muy morena y muy muy delgada, se huele desde lejos el ansia deportiva de los corredores.
Comienza la carrera, salgo al lado de Joaquín, al que no volvería a ver hasta mi llegada a meta, acto seguido me pasa Diego como una exhalación, al poco viene Joséfer al grito de ¡¡¡vamosss!!, me pongo a rueda, es buena rueda y quiero seguirle pero a los 3 km me doy cuenta de que me va sacando de punto y decido cambiar de estrategia. Subo piñones, relajo el ritmo y decido tomármelo con mas tranquilidad, disfrutar, que sea un día para acumular kilómetros y no llegar a la meta perdiendo toda la dignidad ciclista (como en Requena jeje).
La carrera sube sube y sube, los primeros 25 km son de subida y como colofón final, cuando piensas que ya no hay mas montaña, aparece un cortafuegos con rampas espeluznantes, pie a tierra (culpa del delante,jeje que yo quería subir¡¡) Comenzamos a bajar, y ahí me encuentro bastante bien y voy adelantando gente, a mi ritmo sin forzar la maquinaria voy poco a poco remontando, pero tampoco me cebo y voy con bastante paciencia por que se que no está el horno para bollos. En una de esas bajadas primera sorpresa, Luis me da un acuarius en un avituallamiento, me quedé totalmente ojiplático, iba bastante bien y acababa de rajar la rueda trasera. Sigo bajando y segunda sorpresa ,en una senda el corredor que va delante de mi pone pie a tierra para mi mayúscula sorpresa, intento no chocar con él y doy con mis huesos en una matorra, vaya¡¡ con lo que estaba disfrutando¡¡, me subo a la bici y no paran de pasar corredores y me es difícil incorporarme y ahí me doy cuenta de la que bici no frena, he perdido el tornillo que une la pastilla con la pinza y casi se me sale, así que me paro a ponerlo todo en su lugar, otros tantos me adelantan. Luego poco mas, voy tirando y adelantando a alguno que otro y llego a la meta con un tiempo de 2 horas y 21 minutos, la verdad es que la carrera ha sido muy bonita y me hubiera gustado estar mas fino para haberla disfrutado más, pero bueno, el mountain bike es así¡¡¡.
Alli ya estaban Diego, que llego 18º, Joaquín que llegó 15º y eso que iba lleno de moratones por todo el cuerpo, Joséfer llegó 50 º y al que se le ve muy muy fino. Por detrás sobre el puesto 500 Ernesto, Lino, Josep, Etes y Alberto. Etes me contó todas las incidencias que sucedieron a lo largo de su carrera y la verdad es que me pude reir bastante. El caso es que al final todos disfrutamos bastante de Villar ,buena carrera, buen ambiente muy buenas montañas, y reencuentros con muchos colegas, a buen seguro volveremos en la próxima edición.
Y hasta aquí la crónica de hoy, salud y virtud¡¡
XaVeS
La verdad es que se respiraba mountain bike por todos los lados, casi 900 almas ciclistas nos dimos cita en esta localidad serrana, el pueblo era todo un bullir constante de bicicletas, ciclistas, coches con bicicletas, cosas de bicicletas e historias de ciclistas y bicicletas. Un ambiente inmejorable e impresionante, desde luego es el deporte de moda.
Comenzamos a calentar y pronto me doy cuenta, de que hoy no haremos ningún milagro encima de la bici, tocará sufrir y acumular kilómetros que luego me den argumentos para ir a tope. Me percato también en el calentamiento de que la gente está muy muy morena y muy muy delgada, se huele desde lejos el ansia deportiva de los corredores.
Comienza la carrera, salgo al lado de Joaquín, al que no volvería a ver hasta mi llegada a meta, acto seguido me pasa Diego como una exhalación, al poco viene Joséfer al grito de ¡¡¡vamosss!!, me pongo a rueda, es buena rueda y quiero seguirle pero a los 3 km me doy cuenta de que me va sacando de punto y decido cambiar de estrategia. Subo piñones, relajo el ritmo y decido tomármelo con mas tranquilidad, disfrutar, que sea un día para acumular kilómetros y no llegar a la meta perdiendo toda la dignidad ciclista (como en Requena jeje).
La carrera sube sube y sube, los primeros 25 km son de subida y como colofón final, cuando piensas que ya no hay mas montaña, aparece un cortafuegos con rampas espeluznantes, pie a tierra (culpa del delante,jeje que yo quería subir¡¡) Comenzamos a bajar, y ahí me encuentro bastante bien y voy adelantando gente, a mi ritmo sin forzar la maquinaria voy poco a poco remontando, pero tampoco me cebo y voy con bastante paciencia por que se que no está el horno para bollos. En una de esas bajadas primera sorpresa, Luis me da un acuarius en un avituallamiento, me quedé totalmente ojiplático, iba bastante bien y acababa de rajar la rueda trasera. Sigo bajando y segunda sorpresa ,en una senda el corredor que va delante de mi pone pie a tierra para mi mayúscula sorpresa, intento no chocar con él y doy con mis huesos en una matorra, vaya¡¡ con lo que estaba disfrutando¡¡, me subo a la bici y no paran de pasar corredores y me es difícil incorporarme y ahí me doy cuenta de la que bici no frena, he perdido el tornillo que une la pastilla con la pinza y casi se me sale, así que me paro a ponerlo todo en su lugar, otros tantos me adelantan. Luego poco mas, voy tirando y adelantando a alguno que otro y llego a la meta con un tiempo de 2 horas y 21 minutos, la verdad es que la carrera ha sido muy bonita y me hubiera gustado estar mas fino para haberla disfrutado más, pero bueno, el mountain bike es así¡¡¡.
Alli ya estaban Diego, que llego 18º, Joaquín que llegó 15º y eso que iba lleno de moratones por todo el cuerpo, Joséfer llegó 50 º y al que se le ve muy muy fino. Por detrás sobre el puesto 500 Ernesto, Lino, Josep, Etes y Alberto. Etes me contó todas las incidencias que sucedieron a lo largo de su carrera y la verdad es que me pude reir bastante. El caso es que al final todos disfrutamos bastante de Villar ,buena carrera, buen ambiente muy buenas montañas, y reencuentros con muchos colegas, a buen seguro volveremos en la próxima edición.
Y hasta aquí la crónica de hoy, salud y virtud¡¡
XaVeS
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